Apuestas deportivas: enganchados a un juego en el que es imposible ganar
La epidemia del 'burle' online genera cada vez más adictos, una elusión fiscal de miles de millones anuales y una espiral de deudas y créditos rápidos
Apuestas deportivas: enganchados a un juego en el que es imposible ganar
Una droga se expande por España. Una droga destructiva, pero inocua en apariencia: no amenaza con destrozarte el organismo ni con mellarte la boca; al contrario, te promete el éxito a través de la voz de los ídolos del deporte que aparecen en la televisión, en la radio, en las redes sociales y en las camisetas de los grandes clubes de fútbol. Cristiano Ronaldo, Rafael Nadal o Usain Bolt apuestan frente a ti: ganan frente a ti. Es la persona Ronaldo o Bolt, pero se trata, sobre todo, de su símbolo: la excelencia física, la riqueza descomunal, el lujo, la celebridad; el putoamismo. Apuestan. Ganan frente a ti. Y frente a tus hijos: su publicidad ataca libremente en horario infantil. Una droga de enganche rápido como la heroína y de soplo eufórico como la cocaína (esto casi no es una metáfora). Las asociaciones de ludopatía no dan abasto: nunca en décadas de trabajo habían visto un brote de casos como el de los últimos años. “Estamos viendo un comportamiento patológico equivalente al de una persona que lleva jugando 10 años. Con el juego online lo estamos encontrando en meses”, dice Bayta Díaz, psicóloga de la Asociación para la Prevención y Ayuda al Ludópata (Apal) desde hace 14 años.